La Apnea de Sueño es una enfermedad que deteriora su calidad de vida y que se agrava con el paso del tiempo. Como tal enfermedad debe ser tratada médicamente. Ocurre que tratándose de una enfermedad recientemente diagnosticada – lo que no significa que se trate de una enfermedad nueva – muchos médicos la desconocen o carecen de mayor información sobre esta enfermedad u otros trastornos del sueño.
La única forma de diagnosticar si se sufren Apneas de Sueño es a través de una polisomniografía nocturna realizada en un laboratorio del sueño. La prueba consiste en un estudio durante la noche en el que se registran diversos parámetros.
Como se ha indicado, muchos médicos no se hallan familiarizados con los trastornos del sueño. Una vez exponga sus síntomas a su médico de cabecera este debería enviarle a un especialista en trastornos del sueño (otorrinolaringología, neumólogo, neurofisiólogo) o, si existe en su localidad, a un centro u unidad de trastornos del sueño.
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